Marciano (La guerra de los mundos)
Los marcianos son la raza invasora en la novela de ciencia ficción y los antagonistas principales de H. G. Wells: La guerra de los mundos.[1]
En la novela
editarLos marcianos son descritos como criaturas muy simples, al principio eran parecidos a los seres humanos, pero la evolución omitió las partes de su cuerpo innecesarias dejando como resultado enormes cabezas de 1.20 m de diámetro, con un par de ojos oscuros e inhumanos enfrente; justo abajo de estos, un pico carnoso; y alrededor de esta boca babeante, 16 tentáculos (en la novela se refieren a los brazos de cefalópodo como tentáculos) separados en dos grupos de ocho a ambos lados del pico (el protagonista de la novela especula que esos tentáculos evolucionaron a partir de los dedos de las manos y los pies de los marcianos primitivos, alargándose a medida que las extremidades se atrofiaban); por último respecto a los órganos externos, una superficie saliente que hacía de tímpano en la parte de atrás de la cabeza. Su piel era grasosa y de color marrón grisáceo.
En lo que se refiere a órganos internos, los marcianos eran también muy simples: corazón, pulmones, venas y sobre todo: el cerebro, eran el total de sus órganos internos. No tenían estómago y subsistían a base de transfusiones de sangre que le quitaban a otras especies, por lo que se los podría considerar hematófagos.
Los marcianos nunca sentían sueño ni cansancio, trabajaban las 24 horas del día, como las hormigas. Se reproducían asexualmente: el hijo simplemente "emergía" del padre, como las papas. No tenían emociones ni sentimientos.
En otras adaptaciones
editarEn esta versión, el primer diseño del marciano era muy apegado al del libro: tenía una gran cabeza con ojos como de hombrecillo verde, debajo de ellos una boca en forma de "V", 16 tentáculos a ambos lados de ésta piel grasosa y dos superficies salientes que hacían de tímpanos. Cada marciano era de un color diferente en esta versión. El segundo diseño, el más nuevo, ya era más diferente: gran cabeza, ojos grisáceos, y montones de tentáculos (no sólo 16) colgando de la parte de arriba de la cabeza. Incluso de la carnosa boca salían tentáculos. La piel sí era marrón en este diseño.
En esta versión los marcianos son muy distintos a los de la novela. Son pequeños bípedos de aparencia tosca con piel marrón y venas palpitantes. Tienen un solo ojo, con tres pupilas de diferentes colores:azul, rojo y verde. Tienen tres dedos en cada mano. No tienen pies: tienen 6 "tentáculos" con 3 "dedos" cada uno.
En esta poco conocida adaptación del libro, realizada por Timothy Hines, los marcianos son casi exactos a la descripción dada en el libro, con algunos pequeños cambios.
War of the Worlds (2005)
editarEn esta también poco conocida pero bien escrita adaptación de David Michael Latt, los marcianos son criaturas similares a insectos con patas de dos metros de altura, y tienen la habilidad de escupir ácido.
En esta conocida adaptación dirigida por Steven Spielberg -tercera película sobre el mismo tema de 2005- los marcianos son criaturas con mucha similitud con sus máquinas de guerra (trípodes). La cabeza es similar a la de un Triceratops, con un par de ojos negros. Abajo de ellos tienen un pico. No poseen tentáculos. Tienen cinco extremidades compuestas por dos largos "brazos" y una pata, y andan sobre esos tres miembros articulados y dos brazos cortos en el "pecho". Todos sus miembros tienen tres dedos.
En otras obras de ciencia ficción
editarTambién se les menciona, por ejemplo, en la novela De Marte a Providence; donde los marcianos de La guerra de los mundos comercian con los Mi-go.
Referencias
editar- ↑ Conocimiento, Ventana al (21 de septiembre de 2016). «Los marcianos que nunca llegaron: H. G. Wells y ‘La guerra de los mundos’». OpenMind. Consultado el 16 de abril de 2021.