Plantilla:Portada Bueno/3297
Las Actas de los mártires son archivos después del proceso de la muerte de los mártires. Las mejores ediciones son las realizadas por los bolandistas en sus obras Acta Sanctorum, Bibliotheca hagiographica latina, Bibliotheca hagiographica graeca y Bibliotheca hagiographica orientalis. El apelativo mártir (del griego martyr, testigo) se atribuyó en un principio a los Apóstoles, que fueron testigos de la vida y resurrección de Cristo (cf. Hch 1, 8) y a los primeros apóstoles, que por mantener ese testimonio afrontaron la muerte; con el tiempo la palabra mártir pasó a significar al cristiano que da con su sangre testimonio de su fe, para designar posteriormente a cualquier persona muerta por sus ideales.