Una familia feliz es una telenovela chilena producida por la Universidad Católica de Chile Televisión y transmitida por Canal 13 en 1982. Escrita por Sergio Vodanović y dirigida por Regis Bartizzaghi.

Protagonizada por Jaime Vadell, Liliana Ross, Claudia Di Girólamo, Cristián García-Huidobro y Nelly Meruane.

Argumento

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Víctor Altamira (Jaime Vadell) es un rico y próspero empresario, quien desde su juventud ha encaminado todos sus actos para llegar a convertirse en un triunfador. Consecuente con esta decisión y al poco tiempo de titularse de arquitecto, termina con su novia y contrae matrimonio por interés con la hija de un empresario industrial. A la muerte de su suegro se hace cargo de la compañía a la que hace crecer y prosperar.

Al cumplir sus cincuenta años su sueño se ha convertido en realidad: Es un triunfador pletórico de realizaciones y repleto de dinero. Sólo que esa meta la ha conseguido gracias a su personalidad ambiciosa, egoísta y casi deshumanizada que ha menoscabado la vida de quienes lo rodean.

Gracias a sus intrigas, su hermana Marisa (Nelly Meruane) se ha convertido en una solterona, amargada y alcohólica. Su hermano Fernando se va del país para no saber nada más de él. Su hijo Tito, que ha crecido viendo a su padre trepando en pos del dinero, se ha convertido en un cínico y mujeriego que sólo espera el momento para superarlo y desplazarlo.

Su hija Javiera (Claudia di Girólamo), que heredó la vocación artística que él renegó cuando joven por el dinero, mira con desprecio los valores de su padre y lucha por conseguir su verdadera identidad; y finalmente su esposa Ana (Liliana Ross), quien a pesar de las constantes humillaciones que ha debido soportar a causa de sus enredos sentimentales, lo ama y lo apoya refugiando su soledad en obras de beneficencia.

Víctor justifica el curso que siguió su vida después de su decisión de hacer dinero y convertirse en un “triunfador” como una forma de no caer en la desunión familiar que caracterizó su niñez y su juventud. Por ello está permanentemente preocupado de dar la imagen que la suya es “una familia feliz”. Es una mentira en la que él necesita creer aun cuando los hechos demuestran lo contrario.

Además, él explota esta imagen para promocionar sus negocios. Como todos los rubros de sus empresas están relacionados con el hogar y proporcionan “felicidad familiar” no ha vacilado en proyectar la imagen de su familia, como la de “una familia feliz” ideal. Esto le ha traído espléndidos dividendos en el campo comercial y, también, en el social. El lema publicitario de su empresa es: “Con Altamira, una familia feliz”.

Elenco

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Participaciones

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