Uns al-qulub
Uns-al-Qulub ( Córdoba, s. X-XI), esclava de Almanzor, que dominaba el arte de la poesía y otras artes.
Biografía
editarUns-al-Qulub era esclava del todopoderoso visir Almanzor, y destaca por su belleza, inteligencia, vastísima cultura y su facilidad para versificar. Uns al Qulub estaba formada en poesía y canto, y formaba parte del séquito de la corte del dignatario andalusí y actuaba en las fiestas del mismo, como parte de los fastos y de los círculos elevados de cultura que Almanzor creó en Medina al-Zahira, " la ciudad resplandeciente", ciudad palatina en las cercanías de Córdoba en la margen derecha del Guadalquivir. Estando en Medina Azahara se enamoró del poeta Abu I Mugira Ibn Hazm, lo que estuvo a punto de costarles la vida.
El historiador, al-Maqqari, en un pasaje al respecto de la descripción de la ciudad palaciega de Medina Azahara que Abu- I Mugira Ibn Hazm, poeta y prosista primo de Ibn Hazm, autor de El collar de la paloma que fue invitado allí por Almanzor a una comida durante la cual cantó Uns-al-Qulub" un poema dedicado a él, pues se había enamorado encendidamente de él. Cuando terminó de cantar Uns al Qulub, Abu I-Mugira se dio por aludido y le contestó con otros versos.
Almanzor, receloso y enfadado por la dedicatoria de su esclava, le pidió explicaciones espada en mano y ella le respondió diciéndole que con una mentira podría salvar su vida, aunque era mejor y más conveniente decirle la verdad. Así, reconoció haberse enamorado del invitado. Finalmente, Almanzor les perdonó y le regaló la esclava al secretario Abu l-Mugira Ibn Hazm y se casaron y vivieron juntos hasta vivieron juntos hasta su muerte en Toledo en 1046.
Obras
editarCanto de Uns-al-Qulub dedicado a su enamorado Abu I-Mugira Ibn Hazm :
La noche avanza al irse el día
Y la luna aparece como media pulsera ,
diríase que el día es una mejilla
y que la oscuridad es el dibujo del aladar;
las copas me parecen agua sólida
y el vino fuego líquido.
Han cometido un crimen contra mí mis ojos,
¿Cómo podré excusarme a mis pupilas?
Maravillaos, amigos, de una gacela
injusta con mi amor cuando está cerca,
ojalá hubiera un medio de llegar hasta él
y con su amor cumpliera mis deseos.
Versos que recitó para pedir perdón a Almanzor por haberse enamorado de su secretario y haberle cantado los versos anteriores ante su presencia.
He cometido una falta muy grave,
¿Cómo podre excusarme?
Lo ha decretado Dios,
Lo mas hermoso es perdonar
cuando se tiene el poder para hacerlo
Bibliografía
editar- ÁVILA, Mª Luisa, “Las mujeres “sabias” en al-andalus” 176 (nº 100):
- MAQQARI, Nafh, I, 97-99.
- GARULO, Diwan, 138-40
- Desconocido (2004). Biblioteca de al-Andalus . J. M. P. Vílchez y J. Lirola Delgado (eds.), Almería: Fundación Ibn Tufayl de Estudios Árabes, vol. 7 ----