Francisco de Borja y Miguel

sacerdote católico español

Francisco de Borja y Miguel (Santafé de Bogotá, 1609 - Trujillo, 1689) fue un sacerdote católico español, sexto obispo del Tucumán entre 1668 y 1679 y décimo séptimo obispo de Trujillo entre 1679 y 1689.

Francisco de Borja y Miguel

Obispo de Trujillo
4 de septiembre de 1679 - 13 de abril de 1689
Predecesor Antonio de León y Becerra
Sucesor Pedro de La Serena

Obispo del Tucumán
17 de septiembre de 1668 - 20 de mayo de 1679
Predecesor Melchor Maldonado y Saavedra
Sucesor Nicolás de Ulloa
Información religiosa
Ordenación episcopal 16 de marzo de 1671 por Mons. Gabriel de Guilléstegui
Información personal
Nacimiento 1609
Santafé de Bogotá, Virreinato del Perú
Fallecimiento 13 de abril de 1689
Trujillo, Virreinato del Perú
Padres Juan de Borja y Armendia
Violante Miguel de Heredia
Alma máter Universidad de San Antonio de Porta Coeli o Universidad de Sigüenza

Biografía

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Escudo de armas del Ducado de Gandía de los Borja o Borgia

Francisco de Borja y Miguel nació en la ciudad de Bogotá en 1609. Fue hijo de Juan de Borja y Armendia, presidente de la Real Audiencia de Santafé de Bogotá,[1]​ y de Violante Miguel de Heredia. Fue bisnieto de San Francisco de Borja, quien a su vez este último era bisnieto del papa Alejandro VI (Rodrigo de Borja) y del rey Fernando II de Aragón.

Francisco de Borja estudió en el Colegio-Seminario de San Bartolomé, de su ciudad natal, donde también fue ordenado sacerdote.[2]​ Obtuvo el título de doctor en teología en la Universidad de San Antonio de Porta Coeli o Universidad de Sigüenza.

En su juventud fue tesorero de la Catedral de Bogotá, siendo posteriormente trasladado a la de Charcas, con el cargo de arcediano, alcanzando posteriormente el cargo de deán.[3]

En 1664 fue nominado para obispo del Tucumán, con sede en la ciudad de Santiago del Estero. No obstante, debió ser nuevamente nominado en 1688, tras lo cual fue nombrado por el papa Clemente IX el 17 de septiembre de ese año. Marchó hacia la provincia del Tucumán,[4]​ llegando a San Salvador de Jujuy en septiembre de 1670.[5]​ Fue consagrado el 16 de marzo de 1671, fecha en la que también fue canonizado su bisabuelo San Francisco de Borja. Se esperó hasta entonces para que él celebrara su primera misa pontificial, que la hizo en el Colegio de la Compañía de Jesús.[6]

Durante los nueve años que había estado vacante el obispado, este había sido gobernado por el deán Juan Manuel Mercadillo y Patiño, un personaje singularmente ambicioso, que había subastado los diezmos cobrados por la diócesis en su propio provecho, e intentado infructuosamente hacerse elegir obispo.[7]​ El nuevo obispo lo desplazó de su cargo y lo envió lejos de su diócesis.[5]

Se apoyó en todo lo que pudo en la Compañía de Jesús, que resultó un aliado eficaz para reformar el clero y para sus planes misioneros; anualmente los envió en sucesivas misiones apostólicas por todos los pueblos de su diócesis, que el obispo parece no haber visitado en su totalidad.[5]​ Pidió y obtuvo la colaboración de los jesuitas para fundar una misión en el Valle de Zenta, que sería fundada tras su partida y destruida dos años más tarde.[8]

Durante su mandato se produjo una gran creciente del río Dulce, que destruyó parte de la ciudad de Santiago del Estero y causó la destrucción casi total de la Catedral. A raíz de este incidente, el obispo Borja prestó su apoyo al inicio de los trámites para llevar la sede episcopal desde Santiago del Estero a Córdoba, tras una gran inundación en el año 1673.[9]

Durante su gestión se inició la devoción a Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa. Por lo demás, fue un prelado bondadoso y amigable, que evitó los conflictos con las autoridades políticas e incluso con el clero local.[5]​ Su gestión fue calificada como de acierto y de paz, por su vigilancia y celo.

En 1680 fue nombrado obispo de Trujillo, en el Perú, diócesis que había estado vacante muchos años. Durante su gestión terminó las murallas de la ciudad, que fue sacudida por un fuerte terremoto.[3]

Falleció en Trujillo, en abril de 1689, con 59 años de edad. Fue sepultado en el altar mayor de la Catedral de Trujillo.[3]

Referencias

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  1. «Borja, Juan de [administrador colonial] (1564-1628)». MCN Biografías. 
  2. Pacheco, Juan Manuel (1959). Los jesuitas en Colombia. Tomo III. Pontificia Universidad Javeriana. p. 175. 
  3. a b c Pérez Pimentel, Rodolfo. «Francisco de Borja y Miguel». Diccionario Biográfico del Ecuador. Archivado desde el original el 23 de septiembre de 2012. Consultado el 30 de noviembre de 2015. 
  4. Flórez de Ocariz, Juan (1943 [1674]). «Genealogías del Nuevo Reino de Granada». 
  5. a b c d Bruno, Cayetano (1993). La Iglesia en la Argentina: cuatrocientos años de historia. Centro Salesiano de Estudios. pp. 157-160. 
  6. "Noticia de la erección del Obispado del Tucumán, y de los Obispos que ha tenido desde su erección hasta 1749". Córdoba, Libros Capitulares, II, Fº 26.
  7. «La ambiciosa carrera del deán que hizo de todo para ser obispo». Diario Clarín. 22 de marzo de 2005. 
  8. «La actividad misionera en el Chaco Salteño en los siglos XVII y XVIII». Portal de los misioneros de Salta. 
  9. Castro Olañeta, Isabel y Tell, Sonia (2009). «De Santiago del Estero a Córdoba: proyectos y conflictos en torno al traslado de la catedral y de la sede episcopal a fines del siglo XVII». Revista Cifra, de la Facultad de Humanidades, Ciencias Sociales y de la Salud de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (Nro. 4): 171-197. 


Predecesor:
Melchor Maldonado y Saavedra
Obispo del Tucumán
1668-1679
Sucesor:
Nicolás de Ulloa
Predecesor:
Antonio de León y Becerra
Obispo de Trujillo
1679-1689
Sucesor:
Pedro de La Serena