Desde abajo se construyen el nuevo mundo, por que quien mira arriba solo recibe burlas y golpes, así es el México de los pobres que es necesario hacer la diferencia del México de los ricos. Como en todos los países que obedecen ciegamente a los Estados Unidos los que mandan son los empresarios, los “hombres de negocios”, los “señores del dinero”, para ellos el pueblo representa una gran fabrica de producción para su exclusivo beneficio, ellos y sus amigos son los que pueden disfrutar de los placeres que da el tener hombres y mujeres trabajando como esclavos modernos al servicio del capital.